Empezaré a hacer ejercicio la semana que viene.
Dejaré de fumar a fin de mes.
Empezaré a tomar mejores decisiones sobre las personas con las que salgo.
¿Suena familiar? Todos nos hacemos promesas a nosotros mismos. Y con demasiada frecuencia, si fuéramos realmente honestos con nosotros mismos, veríamos que estas son promesas que sabemos que nunca cumpliremos.
Uno de los mayores problemas de mentirnos a nosotros mismos es que nos impide hacerlo mejor cuando se trata de las cosas en las que realmente queremos mejorar. Luego, cuando nos damos cuenta de que no estamos mejorando, nos deprimimos, lo que nos hace aún menos propensos a obtener un impulso positivo la próxima vez.
En otras palabras, mentirnos a nosotros mismos crea un círculo vicioso descendente que hace que sea extremadamente difícil alcanzar las metas que nos fijamos en nuestra vida.
Entonces, si desea hacer cambios en su vida, en su salud, sus relaciones, su carrera o cualquier otra cosa, es importante que deje de mentirse a sí mismo. Entonces puede comenzar a dar pasos positivos hacia un cambio auténtico y duradero.
A continuación se ofrecen algunas sugerencias para realizar cambios positivos en su vida. Acérquese a ellos de una manera que lo ayude a ser honesto consigo mismo para que pueda comenzar a lograr sus objetivos.
Has oído hablar de la importancia de soñar en grande y creer en ti mismo y en lo que puedes lograr. Estamos de acuerdo en que visualizar la fe positiva y practicar puede ser extremadamente poderoso. Pero cuando intentas romper el ciclo de mentirte a ti mismo para poder lograr un cambio real y duradero, los grandes sueños a veces pueden trabajar en tu contra. Después de todo, pocos de nosotros vamos a correr una milla de cuatro minutos, desarrollar el cuerpo de una supermodelo o salir con un Kennedy.
Por lo tanto, haga todo lo posible por establecer metas realistas que sean realmente alcanzables. Al tratar de adelgazar, perder 10 libras sería un gran comienzo para la mayoría de nosotros. En tu vida amorosa, una meta valiosa y alcanzable podría ser salir solo con personas que cumplan con ciertos estándares y te traten como mereces ser tratado.
Además de ser realista, también es importante que sea lo más claro y preciso posible cuando piense en sus objetivos. ¿Qué espera lograr durante las dos primeras semanas? ¿En el primer mes? ¿Al final del invierno? Pero tenga esto en cuenta: su objetivo final puede ser perder una cierta cantidad de libras o pulgadas, o dejar de fumar por completo, pero sus objetivos más inmediatos deben ser lograr la coherencia y encontrar formas de estar más saludables en general, ya sea que estemos hablando de salud física, emocional o relacional. Si eres constante, tus objetivos más visibles se resolverán por sí mismos y comenzarás a ver la evidencia todos los días. Luego, una vez que comience a ver una mejora, será más fácil mantener el impulso.
Sea lo que sea lo que esté buscando, comience con pequeños pasos. Instituya un pequeño cambio a la vez. Por ejemplo, tal vez podría intentar hacer ejercicio durante 30 minutos dos veces por semana. Suena factible, ¿no? Y si no está haciendo mucho ejercicio en este momento, eso sería una gran mejora. O tal vez podrías aceptar dejar de fumar una cierta cantidad de cigarrillos al día o evitar llamar a tu ex durante dos semanas enteras. Tendrá que dar los primeros pasos adecuados para adaptarse a su situación. El punto es que, independientemente de los cambios que desee hacer, encontrará un éxito mucho mayor si comienza con algo pequeño y luego avanza hacia metas más grandes.
Ya sea que esté tratando de ser más saludable, más en forma o más sabio en su toma de decisiones, una de las mejores formas de ser más disciplinado es encontrar un socio que lo ayude. Un amigo puede ayudarte a ser más constante y evitar ciertas tentaciones, y también puede brindarte una responsabilidad básica siempre que necesites apoyo. Si está tratando de hacer cambios importantes en su vida, no lo haga solo.
Esté atento a las formas de felicitarse a sí mismo cuando sea coherente y haga avances positivos hacia sus metas. Por ejemplo, una vez que haya bajado algunas libras o pulgadas, permítase comprar ese nuevo atuendo que tenía en la mira. Después de que te hayas tomado el tiempo de actualizar tu currículum para ese nuevo trabajo, date el gusto de salir por la noche. Solo tenga cuidado de no recompensarse a sí mismo de formas que socaven su progreso. Obviamente, recompensarse con un pastel por perder un par de libras no es una buena idea. La idea es simplemente recompensarte por tomar buenas decisiones y por mejorar tu estilo de vida. Seamos realistas: no es fácil hacer sacrificios y ser disciplinado. Así que asegúrese de compensarse cuando lo haga.
Una de las peores formas en que puedes mentirte a ti mismo es llenándote la cabeza de autocrítica. Por lo tanto, a medida que avanza en sus rutinas diarias, preste atención a su diálogo interno. En lugar de repetirte constantemente frases desalentadoras y críticas, haz todo lo posible por ser positivo. En lugar de decir: «No soy lo suficientemente disciplinado para hacer ejercicio», diga: «Planearé una estrategia realista y me ceñiré a mi plan». En lugar de decir: «Fue tan estúpido por mi parte contar esa terrible broma en mi cita», concéntrate en todas las formas en que la cita salió bien. Sea lo suficientemente honesto consigo mismo como para admitir cuándo realmente lo está haciendo bien.
Recuerde, todos podemos ser propensos a mentirnos a nosotros mismos de vez en cuando. Necesitamos observar lo que estamos haciendo para poder comenzar a hacer los cambios que queremos hacer. Una vez que nos damos cuenta de las formas en las que estamos socavando nuestros propios esfuerzos de mejora, podemos comenzar a armar metas y estrategias que sean realistas, específicas e intencionales. Entonces podremos ser más honestos con nosotros mismos y perseguir vidas que sean mucho más saludables y satisfactorias.